Ayer, a pesar de los movimientos del día anterior, me levanté tranquilo. El problema de cualquier mosqueo es la ilusión de que hay alguien mosqueado dentro de ti. En cuanto te desapegas de «ese que se ha mosqueado», no hay continuidad en ese hilo narrativo que es el cabreo. Basta con eso. Pero si la persona a partir de la cual se ha producido ese proceso espejo no sólo no vuelve con el hilo narrativo sino que te ayuda a «verlo», se diluye como azucarillo en el café.
Si la gente viviera como se vive en Budas Factory, los enfados no sólo se solucionarían con una charla de corazones sino que significarían un modo de crecimiento, viendo cómo ha sido un problema del personaje que estás interpretando, aquel que tiene sus miedos, el ego.
Aquí la gente despierta en cuestión de horas. Lo que hace meses, cuando entrevisté a Fulvio, tardaban una semana o dos o meses, ahora se hace en cuestión de poquito. Han sistematizado tanto el trabajo que ven el «ego espiritual», el «ego dolorido», el «ego que quiere iluminarse» y se «ataca» con preguntas que te hacen cuestionarte el personaje que interpretas.
Ahora mismo, junto a mí, una chica que viene de Madrid sin saber quién era, sin fuerzas, ha entrado en un proceso en el que aparecen las lágrimas y el personaje cae. En este caso, Alberto Varela, el genial ayahuasquero que fue encarcelado hace un par de años con el fin de permitirle iluminarse y escribió a raíz de ello un genial libro llamado «Desde la cárcel, desde mi libertad», es el que ha llevado la dinámica que se desarrolla espontáneamente, entre la convivencia.
La Factoría de Budas es un equipo en el que juegan Pelé, Cruyff, Maradona, Messi, Ronaldo, Ronaldinho en el que todos juegan en pro del equipo porque, en realidad, todo Ser Humano lleva un genio en su interior, porque todos somos dioses. En lugar de solaparse, los seres divinos se suman y nace el Arte de la terapia, la Vida en Acción, la más Sublime Poesía que haya creado el Ser Humano. Aquello que soñé en vivir. Y no sólo eso sino que contribuido a crearlo (con la entrevista que hice a Fulvio el año pasado) sino que participo.
Ayer llegó Fulvio y la cosa tomó otro matiz, evidentemente, pero cuando llegó el genio argentino Alberto Varela nos hizo vivir un Acto Artístico por medio de la terapia que despertó la intuición que viví el año pasado al conocer a Fulvio: Este es el camino hacia la sanación del Planeta y la iluminación, comenzando por España. De aquí va a salir, ahora lo puedo decir con pleno conocimiento de causa: los iluminados (seres que se han encontrado con su verdadero Ser) van a salir como churros en cuanto la buena nueva se extienda. Se acabó el negocio de la Nueva Era de los cursos y cursos que no hacen más que alimentar los egos espirituales de pretender haber llegado a algún lado. Sé que esto generará movimientos pero aquí están dispuestos a sumar todo tipo de conocimientos, como se demuestra que Varela tomara la responsabilidad de llevar su No Terapia, un invento que no podría más que llegar más que de un argentino y que consiste en que los profanos se convierten en terapeutas y, en este caso, los «que saben», los de la casa, en terapeutizados. No voy a contar mucho para que quienes lo viváis tengáis el efecto sorpresa pero fue la cosa más delirante, loca y mágica que probablemente haya vivido. Sólo un detalle: una niña de 12 años acabó haciéndole terapia al propio terapeuta, sin piedad, como siempre aquí. Me encantaría contaros lo que viene después pero voy a guardar el secreto. Pura risa enteógena sin enteógeno. Este hombre lleva la ayahuasca en las venas.
Fulvio me agradeció el haberle hecho la entrevista que ha propiciado que muchos hayan llegado aquí. Me levanté y les dije desde lo más profundo de mi corazón.
-Este es el movimiento que va a traer la Liberación de la Humanidad. Los que estamos aquí (y los que no) hemos comenzado a vivir el Nuevo Planeta y esto se va a extender como la pólvora.
Después sucedió una cosa tremendamente graciosa en torno mío pero como tiene que ver con la terapia no lo voy a contar. Pero fue un auténtico regalo para mí tras tantos ataques (curiosamente, aquí también remuevo cosas pero siempre se hablan y se comparten y sirven para nutrirse).
La atmósfera quedó cargada del enteógeno a través de la pura palabra y acabó con gran fiesta hasta las 6 de la mañana (sin alcohol ni ningún tipo de drogas) aunque nada se prohíbe. Son vegetarianos pero de repente alguien quiere comer pollo y traer vino, y se bebe. No hay normas. Todo se habla. Todo se resuelve.
Contaros cómo esto llevaría un libro, un «Gran Hermano continuo».
En el grupo hay dos napolitanos, una colombiana y un elemento importante, cuatro argentinos, comenzando por Andrea, la pareja de Fulvio, con menos de treinta años y una de las iluminadas. Su padre, un adorable currante de más de 120 kilos con 0 camino espiritual New Age pero con la inocencia faz de un niño, escucha a su hija como a su terapeuta. El mundo al revés. Todo se cuestiona.
Lo intuí hace tiempo. La Risa sería el Arma de la última Re-Evolución del Planeta. Esta es. Esta en marcha. La estamos viviendo.
Se llama Buda’s Factory. Cada día es una aventura, una risa, un llanto. Porque eso es la vida.
Si tu vida es aburrida, no lo dudes, no estás viviendo. Igual que el clima es cada día distinto y en el mismo se suceden las nubes, el sol, el viento, la lluvia, así van nuestras emociones.
Podría estar horas pero quiero seguir viviendo.
Hoy me comentaba Zorione en el desayuno a las 12 de la mañana que ella despertó en un MacDonalds, hablando con Fulvio y Andrea. Otro, en una partida de pin pong.
De verdad, esto es delirante. Un Jaque Mate a tu mente, como lo ha definido Varela. El rey (el ego) sabe que está en Jaque Mate pero se niega a admitir que ha perdido la partida.
Ha llegado el momento de hacernos todos republicanos.
