Los más negativos y con falta de fe me seguís preguntando por qué tengo tanta confianza en que el Bien acabará triunfando: ¿de dónde extraigo esa certeza?
Es difícil de explicar de dónde brotó (y brota) esa fe que va a hacer realidad lo imposible (yo me imagino que del futuro) pero sí que hay anécdotas, en la trastienda de esta página web, que os pueden ayudar a comprender el trasfondo de lo que estoy haciendo, de mi batalla por la Verdad.
¿Recuerdas que ayer publiqué una cortísima crónica del último informe de Benjamin Fulford y que os emplacé a que, en cuanto Victoria Kent publicara el informe completo (ella tiene acceso), lo incluiría y comentaría?
Bueno, pues a los pocos minutos (era un poco antes de las 17 horas de España) me escribe Pili Reyes de parte de El Científico Juan que había publicado el informe completo en su blog, replicándolo. Me pongo a leerlo y descubro que, al final, ha colocado ¡una entrevista de Alfred Webre conmigo y otro vídeo subtitulado de una activista catalana! Bueno, de repente me emocioné y no esperé a la contestación de Pili sobre si el vídeo estaba incluido en el informe de Fulford (a pesar de que Juan había incluido unas líneas, al estar en inglés, no las presté atención). Bueno, ya sabéis, cosas de la emoción; ¡que uno también se emociona! ¡Fulford colocaba uno de mis vídeos!
El caso es que hice mi comentario sobre el resto del informe de Fulford y, al final, mencioné lo del vídeo y me fui a youtube a buscar el código para incrustarlo.
Vamos, que metí la pata, pero en aquel momento no lo sabía. Yo estaba (casi) convencido.
El caso es que le di a «publicar» en el escritorio de mi blog y acto seguido le envié un facebook a Alfred Webre para contárselo y, JUSTAMENTE CUANDO SE LO ENVÍO, ME DESCONECTO (-AN) de Facebook y me piden una clave para volver a entrar. Cosa que me pasó hace meses, como sabéis, pero lo importante es que sucedió JUSTO EN EL MOMENTO EN EL QUE LE ESTABA ENVIANDO UN MENSAJE A ALFRED WEBRE con una metedura de pata.
Bien, como tenía una cita, me marché contentísimo a la calle pensando la cantidad de «guiris» que iban a ver el vídeo y cuando vuelvo, tres horas después, a casa, me meto en el facebook y veo el mensaje de Pili Reyes confirmándome que El Científico Juan había incluido mi vídeo para que se difundiera en las redes anglosajonas. Vamos, que Fulford no lo había colocado.
«Mec, mec, mec: grandísima cagada, Rafapal».
Abro mi web a toda prisa y me encuentro con que la noticia está como la redacté al principio; sin el «adendum» del comentario del resto del informe y sin mi metedura de pata, obviamente.
No os lo he contado nunca pero este tipo de cosas me han pasado unas cuantas veces a lo largo de todos estos años, ¡nunca lo sabréis! ¡Jajaja! Pero ha habido, como digo, unas cuantas veces en las que la conexión, el programa o Dios sabe qué (nunca mejor dicho) se han empeñado en que no podía publicar algo, y nada, no ha habido manera.
De hecho, los más veteranos en esta web recordaréis que hace ya años metí la pata tres o cuatro veces con vídeos de ovnis que eran fake. Bueno: os juro que en TODAS ESAS OCASIONES ¡tuve que apretar el botón de «publicar» no menos de 5 veces porque el blog se negaba a ello! ¡Lo juro! Y claro: cuando no hice caso, la cagué…
Fue entonces cuando aprendí que, aparte de esa fuerza oscura que intenta sabotear mi trabajo (y que ha atacado mi web en tantas ocasiones) hay otra que evita que me equivoque, y si soy dócil, me evita muchos líos.
Bueno, pues me metí en mi blog y, como sabéis los que usáis wordpress, cada ratito que escribes se guarda un «draft», es decir, un borrador de lo que haces.
Allí no había nada.
Nada de lo que había escrito.
Algo pasó en ese momento en el que «me sacaron de Facebook» y «alguien» intercedió en mi blog para que no se publicara.
Son esas cosas, decenas de ellas, las que me recuerdan que hay una fuerza superior a mí que me guía, me ayuda y me saca de líos.
Bueno, ¿qué más contaba Fulford? Pues detallaba el informe sobre el «dinero positivo» que se va a debatir en el Parlamento británico y que las investigaciones sobre las redes pedófilas de las altas esferas va a provocar que finalmente lo aprueben, así como las próximas elecciones en Japón.
Hablaba de un informe sobre «estabilidad financiera» que va a aprobar la UE y que va evitar otro rescate financiero de los bancos y que se va a producir un juicio en Inglaterra en torno a una denuncia sobre ataque nuclear en la que el propio Fulford testificará sobre el tsunami artificial ocurrido en Japón en marzo del 2011.
Aunque todavía ve signos de amagos de guerra, Fulford está optimista porque las barreras de la censura se están bajando en Japón.
Ayer, una amiga que vive en El Salvador me cuenta que el Citi Bank ha vendido su división centroamericana a un banco brasileño. Repasad lo que dice Greenspan más abajo.
Todo encaja.
