«Una comisión del Senado ‘descubre’ que la CIA torturaba en Guantánamo con la aprobación del gobierno norteamericano»: esta es la noticia que la práctica totalidad de los medios de comunicación ha publicado con respecto al ya famoso informe.
El asunto es que sólo un periodista parece haberse leído completo el citado informe. Su nombre: Thierry Meyssan, capitoste de la Red Voltaire.
Y lo que ha descubierto es infinitamente más interesante: que el informe demuestra que en Guantánamo lo que funcionaba era un centro de condicionamiento mental (regido por un psicólogo) para lograr confesiones falsas por parte de los presos islámicos, ex agentes de la propia CIA, e incriminar así a otros presos.
De manera que el citado informe desmonta por completo la supuesta trama de Al Qaeda como ejecutor de los ataques del 11 de septiembre del 2001. Nada más. Y nada menos.
Lo que no se puede explicar, de momento, es la noticia subsiguiente de Rusia Today: «Estados Unidos pide ayuda al Vaticano para cerrar Guantánamo«. ¿De qué ‘ayuda’ está hablando? ¿Tiene que pedir permiso al Vaticano para cerrar esa base? ¿Es que el Vaticano es poseedor de las tierras cubanas?
El informe de Fulford de ayer mismo hacía una alusión velada que podría tener relación: decía que el Papa Francisco había levantado la inmunidad sobre Tony Blair y George Bush Jr…
