Otro asesinato calcadísimo al del fiscal argentino Nisman, encarado a promover la desestabilización interna, esta vez, de la cabeza visible del BRICS, la Rusia de Wladimir Putin.
En paralelo a las primeras manifestaciones que tratan de culpar a Putin del deceso, sus propios servicios secretos filtran una serie de datos sobre el finado Nemstov a través de Sorcha Faal, que arrojan un poco de luz sobre el suceso.
Según esta enigmática informadora, el tal Nemtsov era un catedrático en física cuántica que trabajó para el KGB en los años 80 durante la época soviética. Ya como agente de contrainteligencia que fue entre el año 1991 y 1995 conspiró por cuenta de la ex primera ministra inglesa Margareth Thatcher y a las órdenes del general Kalugin en la transición al régimen democrático, ayudando a colocar en la cumbre del poder al bufón Boris Yeltsin. Es decir, que según esta información el supuesto «líder opositor» ha estado trabajando en realidad para los servicios secretos ingleses desde entonces, que le habían seleccionado para ser un futuro presidente de Rusia (al igual que en las revoluciones de colores por todos conocidas).
Lo más increíble es que el tal Nemstov era parte activa de los últimos desarrollos en la tecnología de la teleportación cuántica, teniendo acceso a los dispositivos de la CIA, actuando en la transmisión de datos al enemigo de esta manera.
Nemtsov fue cuidadosamente asesinado cuando caminaba desde la Catedral de Basilio, acompañado de una modelo ucrania de 23 años.
(Por lo que conocemos últimamente sobre ese mundillo, lo más probable es que la belleza fuera una «dama de compañía» o quien sabe si otra agente).
En este clima prebélico que se respira en Perú y Venezuela (muy relacionado con la cercanía del nuevo sistema monetario), Tom Heneghan nos cuenta que el que perdiera la presidencia estadounidense por culpa de unas elecciones amañadas (Al Gore) junto al actual secretario de estado, John Kerry, han proporcionado a la cúpula del Pentágono las 28 páginas del informe de la comisión del 11-S que señalan a George Bush, Benjamin Netanyahu y la NSA como autores del golpe de estado de aquel día.
El próximo martes el cerebro de esos atentados, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, realizará el acto de mayor caradura de la Historia al dirigirse a los parlamentarios del país que atacó (USA) ¡para solicitarle más armas!
Con seguridad, el atentado sobre Nemstov y las medidas tomadas por Putin de «estado de alerta» ante conflagración nuclear, tienen que ver con estos próximos acontecimientos.
