Cada día que pasa, la situación se clarifica más en Oriente Próximo. China ha enviado tres buques de guerra a Siria a través del Canal de Suez, con el beneplácito del gobierno egipcio.
Por su parte, los «rebeldes entrenados por Estados Unidos» se han quitado la careta, a la vista de la gravedad de la situación para sus intereses, y se han pasado, en masa, a las filas de Al Qaeda, con todo el armamento que traían desde Turquía.
Por otro lado, Siria y Rusia están bombardeando las posiciones de Al Qaeda en Palmira, saqueada por los fanáticos hace semanas. 38 terroristas han muerto.