Ahora empezamos a entender el pánico desatado al ser elegido líder del principal partido de la oposición británico, y el sabotaje que le están haciendo desde su propio partido desde entonces: Corbyn conoce la verdad sobre los atentados del 11-S.
Esto, evidentemente, va a generar sus efectos entre la izquierda española, que a buen seguro se va a tener que posicionar ante este tema.
Aunque os parezca inimaginable, dentro de poco la independencia catalana se convertirá en un asunto de segunda fila en el discurso político español, y cada uno deberá posicionarse.