Se hizo esperar el informe de Fulford del lunes 13 de junio, seguramente porque tenía que verificar cómo informar de la respuesta de la familia Rothschild (a través de una representante femenina) al ultimátum de hace dos semanas de la familia del Dragón: lo que hace es obviar el nombre del interlocutor.
El mensaje tiene sus códigos secretos («¿Golden Lilly?») lo que hace que no pueda asegurar que mi transcripción sea del todo precisa, pero lo que se puede extraer de él es que hay un acuerdo con la familia Rotshchild en cuanto a la manera en que se produzca el reseteo, y que se ha procedido a realizar la primera de las maniobras.
Tan sólo unas horas después de este mensaje, se produjo una caída de los cinco principales bancos italianos que obligó a cerrar la bolsa de Milán. A pesar de ello (y contradiciendo el mensaje de los Rothschild), el cronista canadiense no tiene claro si el nuevo sistema monetario se impondrá pacíficamente o por la fuerza (es decir, si se rendirán antes).
El resto del informe Fulford sirve para explicar el caos ocurrido en las últimas horas (atentados en Orlando y París, ataques del ejército norteamericano a favor y en contra de los terroristas), como consecuencia de facciones dentro del sistema elitista que no aceptan la situación y están decididos a luchar, lo que evidencia una fractura dentro del propio sistema.
Fulford pondera cómo están tratando los medios norteamericanos y la propia Casa Blanca el asunto de los emails de Hillary Clinton y ve posturas encontradas dentro de la prensa y el propio gobierno.
El caos en los Estados Unidos (producto de la bancarrota de «su estado», Puerto Rico) se percibe en que las tarjetas de alimentos para gente pobre están experimentando «problemas técnicos», y elementos de la policía están robando de las tarjetas de los conductores utilizando sofisticados dispositivos electrónicos [Entiendo que no están cobrando y por eso se producen estos actos].
Por último, en el extracto del informe publicado hasta el momento, Fulford señala que el atentado de Orlando no va a modificar la política del Pentágono contra los terroristas y asegura que el terrorista estaba al servicio de Israel y Suiza, siendo controlado a distancia. También destaca que el atentado se produjo al día siguiente de la conclusión de la reunión Bilderberg en Dresde, Alemania.
PD. Yo no daría por sentado que una respuesta como la dada al representante de la familia del Dragón vaya a ser aceptada por toda la familia Rothschild.