Atención a esta noticia -no confirmada, obviamente- de la siempre polémica Sorcha Faal. Si hace unas horas os contaba que Soros ya ha dicho abiertamente que está financiando una revolución en Estados Unidos para impedir que Trump llegue al poder, al parecer éste no se ha quedado quieto y ha hablado con su amigo Erik Prince, antiguo jefe de Blackwater, para que envíe tropas a Norteamérica. En concreto, la empresa Reflex Responses Management Consultancy ha enviado 70 aviones alquilados a Frontiers Service Group cargados de hombres y munición desde el Golfo Pérsico a Estados Unidos.
Como siempre, Sorcha Faal completa su -aparentemente- descabellada información con una plétora de datos, como que la hermana del tal Prince, Betsy de Vos, ha sido nombrada como ministra de educación para desmontar la política de género.
Prince, que cambió el nombre de Blackwater a Academi, siempre fue un agente de la CIA hasta que Hillary le echó en 2010, se supone porque se dio cuenta de que estaba trabajando para Al Qaeda. Entonces nos enteramos de que se fue a vivir a un chalét de Trump en el Emirato del golfo Pérsico de Abu Dhabi, donde existe una pugna entre dos grandes magnates. Por un lado, Hussain Sajwani, presidente del DAMAC Group que se opone al Estado Islámico, y por otro, Khalaf Al Habtor, que lo financia, al igual que a Hillary Clinton.
Siempre según la información de esta fuente rusa, Erik Prince creó un ejército secreto con el beneplácito del monarca de Abu Dhabi, mientras que el magnate opositor al Estado Islámico, amigo de Trump, le habló de los planes de su contrincante, después de lo cual, Trump comenzó a hablar de impedir la entrada de musulmanes en Estados Unidos (conocía que iban a llegar terroristas).
Mientras tanto, los seguidores de Hillary están intentando impugnar el resultado de las elecciones, acusando de fraude electoral, temerosos de que todo su siniestro andamiaje se deshaga.
Entre las muchas maldades que saldrán a la luz, el exterminio de 15 millones de bebés de la comunidad afroamericana desde 1973, perpetrados por la siniestra organización de control de natalidad y abortista, Planned Parenthood.
