La batalla del grupo encabezado por Donald Trump contra el «Estado Profundo» (gobierno secreto) norteamericano parece recrudecerse si son ciertas las informaciones de Sorcha Faal en el sentido de que el ya ex jefe del FBI, James Comey, estaría bajo arresto de los Marshalls en torno a las revelaciones de secretos de estado a la prensa.
Estas fuentes rusas confirman algo que ya dijo Tom Heneghan hace años: que los militares habían activado un Gran Jurado para procesar a los corruptos del propio estado, comenzando por Hillary Clinton, que obligó a Obama a desactivarlo, pero que en noviembre el propio ex presidente tuvo que reabrir. El nombre en código de este jurado es «Midyear». El almirante de la NSA Mike Rodgers y el agente de contrainteligencia del FBI, Priestap, son los hombres que han comandado estas operaciones y vendrían a representar a los «caballeros blancos» que preparaban un contragolpe, según reveló el ex asesor presidencial Steve Pieczinec hace meses.
El fiscal de Nueva York Preet Bharara fe destituido por negarse a acusar a Hillary Clinton, y por eso fue sustituido Joon H. Kim, que procesó al marido de Huma Abedin, Anthony Wiener, que a su vez recibió una rebaja de su pena por señalar a Hillary, lo mismo que la propia Huma Abedin, que ha revelado recientemente el lugar donde se escondían los «archivos perdidos».
Ahora Comey se va a tener que enfrentar a un fiscal que es como un perro de presa, llamado Dreeben, y que ya tiene preparados cargos contra él por revelación de secretos.
En otras palabras: que Trump tiene bien preparado su contraataque al Estado Profundo.
