Están pasando tantas cosas (y algunas tan contradictorias) que es difícil poner orden en el momento en el que estamos viviendo, aunque eso, en sí mismo, es un dato: muchas cosas están sucediendo.
El mejor ejemplo es con el bitcoin, que después de varias negativos anuncios por parte de diferentes gobiernos, de repente, tras caer a 6.000 dólares, ha rebotado hasta 11.000 (gracias a la inyección de dinero de un misterioso superinversor). Maduro lanza por fin el «petrobolívar» y, de repente, el gobierno español anuncia exenciones fiscales para los inversores en criptomonedas.
En su último informe, Fulford (ver más abajo) señala que China se bajó del «carro de las criptomonedas» en las últimas semanas por un informe que decía que una inteligencia artificial podría causar el caos en este mercado, pero ahora anuncian que podrían sacar al mercado una criptomoneda basada en oro.
Después, está la fecha del próximo 26 de marzo, que es cuando, por fin, China comenzará a pagar el petróleo que compre en su moneda, renmibi (yuan), y los rumores de que el final del petrodólar se acerca, al tiempo que se esparce el pánico a otro crash de la bolsa. Y Fulford, a todo esto, hablando de negociaciones entre Reino Unido, Vaticano, China y militares patriotas USA para llegar a un acuerdo final sobre el nuevo sistema monetario. ¡Y nos cuenta que el ex CIA y youtuber, Robert Steele, (una de mis fuentes últimamente) ha estado en Japón con la familia del Dragón Blanco negociando en nombre de los marines USA!
De telón de fondo, el resurgir del conflicto en Siria, con varios frentes, y la indefinición del papel del ejército norteamericano (y si realmente Trump lo dirige o no), atacando al ejército ruso, apoyando a los kurdos contra Siria y Rusia, lo que generó el contraataque turco y, en fin, llevándonos al borde (otra vez) de la III Guerra Mundial. Todo ello, por supuesto, mientras Netanyahu es procesado en Israel, lo que para muchos es el origen del conflicto (esconder su procesamiento). Así las cosas, según Sorcha Faal, Rusia ha dado un ultimátum a Estados Unidos, que se ha de validar en estos días y que, obviamente, tiene mucho que ver con las negociaciones que se están llevando a cabo sobre el sistema monetario.
Creo que ahora entendéis mejor por qué decía al principio que es muy difícil resumir el panorama geopolítico mundial ahora mismo. Creo que lo máximo que se puede decir es que «todo puede pasar». Para bien y para mal.
