El anticipo del informe Fulford de esta semana promete porque, haciéndose eco de las declaraciones del jefe de la OTAN, Stolteberg, en el sentido de que Israel no es parte de la OTAN, afirma que Estados Unidos ha abandonado al estado judío a su suerte. Después, comenta que el actual máximo mandatario saudita Bin Salman fue asesinado el pasado 21 de abril en un tiroteo palaciego. Más adelante, confirma que el ex embajador Leo Wanta (leed El Sentido de la Historia para más información) ha sido restituido como testaferro de los famosos 26 billones de dólares con los que iniciar un «Plan Marshall». Una de las fuentes que informal cronista le ha dicho «si le van a devolver el dinero a Wanta, se lo van a dar de Vanguard». Es decir: que si van a restablecer el trust que Reagan y Miterrand instituyeron durante la guerra fría eso implica la caída de los tres grandes fondos de inversión que, se deduce, se aprovecharon de él. Y los cita expresamente junto con sus respectivos propietarios reales, con una interrogación al final: Vanguard (¿Bush?), BlackRock (¿Rothschild?) y State Street (¿Rockefeller?).
Fulford sigue insistiendo en que el nuevo gobierno español de Pedro Sánchez está alineado con el «nuevo mundo», cosa que me extraña un montón. Según el cronista canadiense afincado en Japón, sólo Francia, Alemania y Holanda permanecen bajo el control de la mafia jázara.
PD: Los rumores en torno a la dispensación de los primero fondos de prosperidad encajan con este optimista informe.