El día después del enésimo sabotaje al candidato al Tribunal Supremo que cataliza la purga de los satánicos, Q hizo dos cosas:
1-Avisó de la inminente censura de Twitter, Google y Facebook a los comentarios de los partidarios del presidente, exhortado a la «mayoría silenciosa» a hacerse ruidosa.
2-Denunció la conspiración demócrata para evitar esa purga, enlazando la intervención de una senadora de ese partido, en la que resumía su propia conspiración (de 1 hora dos minutos a 1 hora tres minutos, 45 segundos).
3-Por su parte, Trump recalcaba que Kavanaugh había sido ya investigado por el FBI siete veces.