En este caso, los informes de la inteligencia rusa (a través de Whatdoesitmean) y los de la norteamericana (por medio de Q) coinciden y encajan a la perfección, de donde podemos deducir que son la antesala de algo grande que está a punto de pasar.
El miércoles 5 de diciembre llegó, y nada pasó, según dice Q, de manera bastante críptica, porque los demócratas consiguieron dilatar el proceso para desclasificar los documentos que incriminan a la Fundación Clinton. Sin embargo, el próximo jueves 13 de diciembre ya está planteada una audiencia del subcomité encargado de vigilar las operaciones gubernamentales, que tiene a la Fundación Clinton como foco principal.
Mientras tanto, el equipo de Trump se ha quitado de en medio al último agente de Obama dentro del FBI, nada menos que Priestap, que era el jefe de contrainteligencia, o lo que es lo mismo, el encargado de los trabajos sucios; asesinatos y demás. Según los comentarios de Q, los actuales jefes del FBI y del Ministerio de Justicia (Whitaker, Wray, Huber y Horowitz) están llevando a cabo reuniones secretas para preparar «algo». El (supuesto) motivo para postponer la purga de los Clinton fue el funeral por Bush Padre que, según Fulford y el propio Q, se retrasó para hacerlo coincidir con esa fecha. En la imagen que Q publicó, se ve cómo Trump (ver foto arriba) no participó en la iglesia con respeto por la muerte de este criminal.
Los rusos, por su parte, anuncian por boca de «Sorcha Faal» que los recientes allanamientos de diversas sedes bancarias en diferentes países tienen que ver con el juicio a la compañía de abogados radicada en Panamá, Mossack Fonseca, cuyos dirigentes han sido detenidos para que cuenten cómo han «lavado» el dinero robado por la Fundación Clinton, dentro de lo que se conoce como «Los papeles de Panamá». [Vamos a ver si los periódicos españoles que colaboraban con esta investigación, Eldiario de Nacho Escolar y El Confidencial, continúan informando ahora]. El titular de Whatdoesitmean que antecede esta información no puede ser más explícito: «El inminente arresto y juicio contra Hillary Clinton coloca a Rusia en pie de guerra», debido a las implicaciones que tiene para ese país una parte de los dineros malversados por los Clinton.
Párrafos más adelante, la enigmática informadora explica cómo «la narrativa de la supuesta corrupción de Trump con los rusos» sólo es una estrategia para ocultar lo que está a punto de aparecer respecto a la Fundación Clinton, y acto seguido describe algunos hechos acaecidos en los últimos días:
-El 21 de noviembre, las fuerzas del FBI leales a Trump se reunieron con sus homónimos en otros países para intervenir las cuentas de Hillary Clinton en diversos bancos (muy posiblemente, la redada en el Deutsche Bank tuvo que ver con esto).
-El 29 de noviembre, estas mismas fuerzas allanaron las oficinas del influyente político de Chicago, Alderman Burke, «que conoce donde han enterrado los cuerpos de (los asesinados) por Obama y Clinton».
-El mismo 29 de noviembre, las fuerzas leales a Trump en el ministerio de Justicia elevaron cargos contra el millonario donante de los Clinton, Abdul Huda Faroki.
-El mismo 29 de noviembre, las fuerzas leales a Trump allanaron la casa de Dennis Nathan Cain para establecer una «cadena de custodia» sobre las pruebas que incriminan a Hillary Clinton en la venta de uranio a Irán.