Sin duda que esta noticia (sumada a las que he ido publicando en las pasadas semanas) confirma definitivamente que estamos ante la implosión de la paranoia conocida como «calentamiento global por influjo del CO2» y que ahora mismo es el pretexto para hundir las economías de los países a base de «impuestos ecológicos».
El profesor de física Peter Ridd ha ganado el juicio que interpeló contra la universidad australiana en la que enseñaba, de donde fue apartado por cuestionar el impacto en los arrecifes del supuesto calentamiento global, cuyas catastróficas predicciones no se han cumplido en la última década.
Al hilo de su triunfo sobre el corrupto sistema, ha afirmado que toda esta paranoia pone en cuestión a la propia ciencia, que ha caído en esta postura histérica y que ha perseguido a los disidentes como él.
Estamos, como digo, ante la soberana implosión de la «dictadura científica».
PD 1: Una corriente marina excepcionalmente caliente en el Océano Pacífico puede causar problemas a la fauna marina. Casi todos los verdaderos científicos coinciden que el verdadero problema está en el mar.
PD 2: En este largo artículo en torno a la autocrítica del partido independentista catalán, CUP, sobre el proceso secesionista se dice, al final, que van a intentar aprovechar el «tirón actual» del movimiento contra el cambio climático. Imaginaos si tiene repercusiones esta paranoia, ya desmontada.
