De acuerdo a lo que cuenta la investigadora de Microsoft, Mary L. Gray, lo que estamos considerando «inteligencia artificial» funciona porque hay miles de personas (mal pagadas) que están enseñando constantemente a la máquina lo que realmente quieren o quieren decir (en el caso de la censura) los clientes o usuarios de redes. En definitiva, la máquina no entiende las sutilezas de la mente humana y por ello ha de haber humanos «explicándole» lo que quieren decir. Lo cual, evidentemente, es una EXCELENTE NOTICIA porque quiere decir que el pánico extendido en los últimos años a que las máquinas nos sustituyan se basa en una falacia; la de que la máquina puede aprender por sí sola. Esta entrevista de El Semanal lo desmiente por completo, en base a lo que ahora mismo está sucediendo. La máquina se basa en datos introducidos a su sistema; cualquier variación del lenguaje humano en base a sentidos indirectos o creaciones del lenguaje no las entiende, y por ello ha de haber humanos que introduzcan esas mejoras.
