Minutos antes de irme a dormir, os conté que -coincidiendo con la firma del acuerdo comercial China-USA- Rusia acababa de iniciar una crisis institucional, al plantear Putin una reforma de la constitución que ha originado la dimisión del gobierno al pleno, creándose uno de transición.
En dicho artículo me planteaba dos hipotéticas causas de ese movimiento, a todas luces relacionado con el reseteo, que hoy por la mañana ya puedo aclarar (al menos parcialmente), al conocer el perfil del nuevo primer ministro en funciones: el ex director de la agencia tributaria y creador del propio sistema informático que posibilita la recaudación de impuestos en el país euroasiático desde la caída del comunismo, Mijaíl Mishustin.
Conociendo este dato, y correlacionándolo con que este hecho ha sucedido el mismo día en que los presidentes chino y norteamericano firmaban el acuerdo que da luz verde al reseteo, es 100% seguro que el propósito de esta crisis es que Rusia se adapte al nuevo sistema monetario basado en informática cuántica (QFS), lo que se convierte en un nuevo refrendo de que el ansiado reseteo es un hecho.
Dicho lo cual, no quita para que las otras dos hipótesis planteadas (convertir a Putin en Zar y volver al derecho natural) sean perfectamente posibles.