Nueva andanada de mensajes de Q, de muy distinta temática mientras los cerebros del Nuevo Orden Mundial siguen asustándonos con medidas de confinamiento ad infinitum y reaparición del virus: no les hagáis caso, necesitan de nuestro miedo para fortalecer sus alicaídos planes.
Mientras los medios siguen el guión que sus amos les dictan, los patriotas norteamericanos de Q siguen enviando mensajes de lo que le viene.
Ayer, el hermanastro de Obama, Malik, salió «del armario» como seguidor de Q, enviando una sugerente «campana»: ¿habrá sonado la hora?, nos preguntamos todos. Minutos después, volvía a repetir que la desclasificación de los urdidores de la campaña contra Trump, conocido como «Fisagate» será el detonante para las detenciones: «los cazadores serán cazados», como reza este meme que replicó Q, al tiempo que recordaba la codificada frase con la que Trump encaró la presente pandemia: «él es un presidente en guerra contra un enemigo invisible». Acto seguido, enlazaba a unas declaraciones del fiscal general Barr enfatizando la sucia campaña llevada a cabo por el partido demócrata para destituir a Trump. Acto seguido, continúa señalando a Hillary Clinton como urdidora del dossier Steele con el que intentaron destronar a Trump, enlazando a un tuit del propio presidente, unido a esta advertencia: «¿de verdad creéis que el mayor escándalo de la historia de los Estados Unidos se va a saldar sin castigo para los conspiradores?».
Por último, Q se refiere a la manipulación de la información de la pandemia en Estados Unidos, donde la CBS está mostrando imágenes de hospitales italianos como si fueran norteamericanos: «la verdad está delante de tu cara«. En el mismo sentido, un médico, que está repitiendo lo que os llevo diciendo desde hace días: que están inflando las cifras de muertos. Están confundiendo «muertos con coronavirus» con «muertos de coronavirus», dice en Fox TV. Todas las miradas apuntan a Anthony Fauci, el director de enfermedades infecciosas, que es el mismo que ha dicho que ya no nos vamos a volver a dar la mano nunca más.