Política actual — 15 mayo, 2020 at 9:14 am

Q anuncia desclasificación de información jaquemate contra Obama a mediados de junio; el senador Graham, señalado como traidor, dejará su cargo en la comisión de justicia

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[De seguro, muchos os estaréis preguntando sobre mi opinión acerca de las declaraciones de Trump sobre que «usará a los militares para colocar la vacuna». Sinceramente, yo no creo que lo vaya a hacer y, más bien, es una «intervención paradójica» para provocar una reacción entre la población, ahora que el libro de Judy Mikovits sobre cómo las vacunas han creado las enfermedades modernas se ha convertido en el número 1 de ventas en Amazon y de entre los primeros, en la lista de The New York Times. No tiene ningún sentido que Trump impulse algo tan impopular justo en el momento que más gente se está enterando de la verdad. Así que, creo, lo que quiere es provocar la reacción de la gente para luego rectificar… con lo que previamente creía. Es lo que se conoce como «intervención paradójica» o hacer lo contrario de aquello en lo que crees, para provocar la reacción de lo que sí quieres].
Los mensajes de ayer de Q se han centrado en la figura del jefe de la comisión judicial del Senado, el republicano Lindsay Graham, que ha quedado retratado como un traidor al desoír la recomendación de Trump de llamar a declarar al ex presidente Obama y proponer, en cambio, que ambos declaren en el Congreso. Como consecuencia de ello, Q anticipa que será sustituito por Chuck Grassley.
Como véis en el mensaje de arriba, Q afirma que dentro de tres o cuatro semanas se liberará información explosiva sobre la participación de Obama en la conspiración contra Trump, y que coincide con las fechas de las declaraciones en el Senado de los principales implicados en la conspiración, fijadas para el mes de junio. La abogada del General Flynn, Sidney Powell, ha escrito una carta en la que acusa directamente al ex presidente Obama de liderar esa conspiración. Otro de los señalados más importantes, el ex jefe de la CIA, John Brennan, sabedor de la que se le viene encima, está despotricando de lo lindo contra Trump. 
Uno de los senadores que se distinguió en la investigación de este caso ha denunciado que el informe del FBI en el que reconocían que no existían pruebas, al parecer, ha desaparecido. Increíble.


En este orden de cosas, de «fuego a discreción», varios diputados están siendo investigados por haberse lucrado en bolsa por su conocimiento de cómo las medidas para afrontar el Covid-19 iban a cambiar la economía. La poderosísima diputada demócrata Feinstein es una de las investigadas, al igual que Nancy Pelosi.
Por otro lado, mientras en los estados demócratas los ciudadanos se rebelan contra las medidas represoras para permanecer con el absurdo confinamiento, los estados donde gobiernan los republicanos, como Florida, están volviendo a la normalidad, reabriendo los eventos deportivos.
El último mensaje de Q ha consistido en una carta de Obama al jefe de los archivos nacionales en el que le pide que no desclasifique el contenido de algunas reuniones en torno a Ucrania, que con seguridad tienen que ver con los sobornos en los que estuvo implicado el hijo de Joe Biden, Hunter.
En definitivas cuentas, la «ametralladora» de informaciones desclasificadas va a funcionar en paralelo a la evolución judicial de cada uno de los asuntos.