Política actual — 24 agosto, 2021 at 11:37 am

El fiscal militar presenta pruebas irrefutables de que Bill Gates dirige una red de tráfico de niños: su ex, Melinda, lo confirma

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La esperadísima crónica de Real Raw News sobre el juicio militar a Bill Gates comienza con un gran misterio: en la portada no aparece el artículo (¿se les ha podido olvidar colocarlo en portada?).
El relato en sí guarda una estricta coherencia con pasadas informaciones y revela detalles que difícilmente pueden ser inventados.
De principio, revela el nombre del abogado de Gates, David Baluarte, que ya defendió a yihadistas que estaban encerrados en Guantánamo. Como en otras ocasiones, el vicealmirante de la marina John Hannick, dirige el juicio. En este primer día (parece que va a durar bastante) presentó pruebas de que Bill Gates ha colaborado con Jeffrey Epstein en una red de secuestro y tráfico de niños. En concreto, esa red era controlada desde el sótano de un rancho que Gates tiene en Wyoming (dato que está corroborado porque hace pocos años ese rancho fue allanado y se encontró pornografía infantil, aunque se responsabilizó del delito a uno de los ayudantes de Gates). El fiscal presentó una tarjeta SD incautada en una de las propiedades de Gates donde aparecen vídeos con este tipo de perversiones.
En uno de esos vídeos, aparecen Gates y Epstein discutiendo la estrategia para secuestrar niños del Tercer Mundo para venderlos a la élite. El propietario de Microsoft propone actuar en El Salvador y Epstein le responde que los pervertidos prefieren niños blancos, de raza caucásica. Gates se ríe en el vídeo y afirma: «deberíamos traerlos aquí. Estamos aislados y nadie nos puede tocar». El fiscal le pregunta al abogado de Gates si tiene alguna explicación para esas palabras y el magnate de la informática le susurra unas palabras al oído de su representante, que inmediatamente expresa: «se trata de un mero juego de rol. Epstein es un mero amigo de Gates y estaban bromeando, ¿o cree usted que va a ser tan tonto de grabarse a sí mismo trazando un plan tan siniestro». El fiscal le contesta que la explicación es que su cliente es un narcisista y megalómano, y pasa a mostrarle una hoja de cálculo donde aparecen 65 nombres, con una cifra al lado de cada uno, que van desde los 250.000$ a los 3 millones, y el color de pelo, de ojos y edad de cada uno. Esos 65 nombres corresponden a 65 niños que fueron raptados en parques naturales de los Estados Unidos. El abogado responde que «es un hecho que hay niños que desaparecen en los parques nacionales, y mi cliente está preocupado por la cuestión, ¿pero cree usted que mi defendido se va a dedicar a secuestrar niños con un saco»?
El fiscal le contesta que no piensa que él mismo vaya a hacerlo, pero sí otros a los que haya pagado, ¿cómo explica entonces la cifra de dinero asociada a cada niño? (sigue).
Seguidamente, el fiscal apretó un botón que hizo que apareciera una pantalla de vídeo. Momentos después se proyectó la confesión de la ex mujer de Bill Gates, que fue presentada con su nombre de soltera: Melinda Anne French. Acto seguido, dijo que estuvo casada con Bill Gates y, admitiendo que ha recibido una rebaja de la pena a cambio de su testimonio, dirá lo que sabe sobre el caso. En ese momento, el siempre autocontrolado magnate se levantó enfurecido de la silla, apuntando sus encadenadas manos a la pantalla: «¡hija de puta cazafortunas, no pueden creer nada de lo que diga!» El fiscal exigió al abogado que calmara a su cliente, al tiempo que llamaba a la policía militar para que lo sentara.
-«Señora Melinda Anne French: ¿es cierto que el 14 de agosto del 2014 escuchó a su entonces marido jactarse de que se dedicaba a secuestrar niños de Estados Unidos y de otros países?»
Melinda asintió con la cabeza y dijo: «y en otras ocasiones también se lo oí decir».
-«¿Se lo dijo abiertamente?»
-«Sí, lo decía riéndose, y con una risa siniestra se jactaba de la cantidad de niños que habían secuestrado de sus familias».
-«¿Alguna vez le dijo una cifra de los niños secuestrados?»
-«No, pero claramente estamos hablando de cientos, muy posiblemente, miles».
-¿Y nunca pensó en revelar este delito a las autoridades».
-«La verdad es que vivía una vida muy lujosa y se enterara de que planeaba delatarle mi vida, me mataría, como me dijo en alguna ocasión».
Dicho esto, el fiscal emplazó para la segunda sesión del juicio, que comenzará hoy martes 24 de agosto a las 10 de la mañana en Guantánamo.