Política actual — 31 enero, 2022 at 10:47 am

El capellán que asistió a la ejecución de Gavin Newsom afirma que estaba poseído

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(La presente crónica de Real Raw News se escapa al contenido habitual de esta web, pero llega a las profundidades del Mal que gobierna el Planeta, en la misma línea de lo que vengo defendiendo desde hace tiempo, e incluso, de mi libro «La locura Moderna» en el que defiendo que las enfermedades mentales son en realidad producto de posesiones demoníacas de diferente grado. En este caso, pues, la política y la espiritualidad se dan la mano).
En mi resumen de la crónica de la ejecución del gobernador de California Newsom omití traducir que, antes de morir, profirió unas maldiciones, en latín, a los soldados que le ejecutaron. Pues bien, el capellán que estuvo presente en el acto ha revelado a Real Raw News que pudo comprobar que Newsom estaba poseído por el demonio. «Me miró, y mi sangre se heló. Su mirada congeló mi espíritu». El capellán d’Auguste dijo que cuando Newsom le miraba escuchó una voz en su mente que le decía «no hay Dios. Sólo existimos nosotros. Mi cuerpo se heló hasta que invoqué la presencia de Cristo en mi corazón y él lo llenó de coraje». Este capellán ha estado presente en las ejecuciones de Bill Barr y el marido de Chelsea Clinton y no vio nada parecio.
«Lo que sentí es que era más que un hombre. No, deja que me corrija: Gavin Newsom era menos que un ser humano. Percibí la inconfundible presencia de un espíritu habitándole. Los maestros de la iglesia dicen que los poseídos no son considerados malignos en sí mismos, ni completamente responsables de sus actos, porque es el demonio el que los dirige. Puede que me censuren por decir esto, pero desde lo que conozco de Newsom, el hombre, sus actos fueron una afrenta al corazón de la moral. Era débil y maleable, lo que le dejó abierto a la posesión. La entidad demoníaca que moraba dentro de él amplificaba su falta de moral». «Si fuera por mí, expulsaría al demonio y trataría de salvar al demonio, pero no tengo autoridad sobre esas cuestiones».