En el segmento de su informe semanal que ha liberado a estas horas, Benjamin Fulford ha dado una explicación a la sorprendente declaración del Vaticano, ordenando repatriar al IOR (Banco Vaticano) durante el próximo mes de septiembre todos los activos que obren en cuentas en el extranjero. Según el insider canadiense, esta decisión marca el final del control de las finanzas vaticanas por parte de la Banca Rothschild (la «madre del cordero» en la disputa conspiranoica jesuita/judía sobre quién controla a quién). La simultánea elección de 20 nuevos cardenales y las propias declaraciones de Bergoglio anunciando su retirada hacen que los rumores sobre la elección de un nuevo Papa se disparen. También cuenta que todos los mandatarios mundiales tienen cuentan secretas en el Vaticano, donde reciben sus correspondientes sobornos, como en el caso del Covid. (Cuando consiga ver el informe entero, resumiré su contenido).
