Historia oculta — 24 enero, 2023 at 7:11 pm

El documental «Secretos de la Tribu» (yanomami) describe los abusos sexuales y con las vacunas cometidos por los antropólogos: IMPRESCINDIBLE

by

UN DOCUMENTAL ABSOLUTAMENTE IMPRESCINDIBLESin duda que el género del documental es el más boyante de la industria cinematográfica actualmente. Mientras las historias del cine ya no sorprenden a nadie, a través del documental nos enteramos de vidas alejadas de las nuestras y parece que hasta las vivimos (la sensación perdida con el mundo del decadente cine actual).
Cada año vemos algunos documentales que nos dejan epatados, pero sólo en contadas ocasiones vemos algunos HISTÓRICOS, en el sentido estricto de la palabra; es decir, que cambian la Historia.
Algunos de ellos, están viniendo desde el lado de la antropología, y no por casualidad: esta ciencia y el género del documental están intrínsicamente unidos porque, de hecho, los (buenos) antropólogos han grabado imágenes y entrevistas a tribus exóticas que se han convertido en grandes documentales y algunos de ellos se convirtieron en estupendos documentalistas.
Hace unos años os hablé del documental sobre una tribu perdida en el Amazonas brasileño, titulado «La tribu perdida» que desmentía muchos de los mitos que circulaban sobre «los buenos salvajes».
El que acabo de ver, titulado «Secretos de la tribu», acerca de los yanomami del Orinoco venezolano-brasileño, abundando en el mismo tema, supera al anterior porque, no sólo aborda la vida y costumbres de esta conocida tribu sino que explica cómo les cambió el CONTACTO CON LOS PROPIOS ANTROPÓLOGOS (desde los años 50 del siglo XX) y, en suma, de él sale una durísima crítica hacia esta ciencia, en la línea de lo que escribí en mi libro El Sentido de la Historia (lo que cuento a continuación viene a ser como llevar a un documental lo que yo mismo escribí en aquellos capítulos) y, de fondo, lo que se debate es la propia explicación del Ser Humano.
(Siento hasta nervios cuando escribo estas líneas, de lo importante que es).
Al tiempo que nos habla de la época en la que los yanomamis fueron «descubiertos» por los antropólogos, se nos cuenta la existencia de dos corrientes en la antropología por aquellos años 50: los marxistas o izquierdistas y los de derechas (que más tarde se convertirán en biologistas). Los primeros afirman que las guerras y peleas entre los clanes yanomamis se producen por la lucha por los «recursos» (comida) y el líder de los segundos, un tal Napoleón Chagnon, que vivió largas temporadas con ellos, sabe a ciencia cierta que se pelean por las mujeres, por celos y por infidelidades: en las propias entrevistas a los indígenas reconocen que esta segunda es la razón verdadera, y hay pruebas de que no les falta comida.
La «contaminación» de las costumbres de los «salvajes» a través del contacto con los antropólogos es un tema recurrente para cualquiera que se interese por el tema. En un ambiente muy competitivo, y para ganarse su confianza, empezaron a regalarles hachas, machetes, hamacas y utensilios útiles, a cambio de que los indígenas participaran en sus investigaciones.
Nos encontramos en los años 70 y 80, cuando la corriente de antropólogos freudianos, seguidores de Levi Strauss, envían a un francés llamado Lizot, pederasta, que recopila las consabidas pruebas de que los yanomamis practican el «sexo libre»: pederastia, homosexualidad, inexistencia de pareja…
Aquí es cuando el documental traspasa la barrera entre ser estupendo y comienza a ser HISTÓRICO, pues no sólo los antropólogos rivales (de «derechas») denuncian que el tal Lizot prostituyó a los niños a los que violó, sino que introdujo, él mismo, el sexo oral y anal en esa tribu, a través del soborno: ¡lo cuentan los mismos yanomamis que fueron violados cuando eran pequeños! Como lo oís. Este documental demuestra que los antropólogos freudianos corrompieron las costumbres de esa tribu, de la misma manera que hizo Alfred Kinsey con los presidiarios a los que dio dinero para que violaran a niños y así hacer creer que la homosexualidad es algo innato.
Pero si en este punto creéis que el documental ya no puede llegar más alto, nos queda la «traca final». Mucha atención, porque os vais a caer de espaldas al leerlo.
Resulta que a principios de los 90 (creo, pues no se aclara la fecha), la «Comisión de la Energía Atómica USA»* financia una expedición para investigar la resistencia de los yanomamis a la radiación y a enfermedades como el sarampión, en la que les llevan la propia vacuna de la sarampión, con la esperanza de recopilar datos para los famosos CDC, es decir, los tristemente famosos Centros de Detección de Enfermedades, bajo la guía del líder antropólogo de derechas, el señor Napoléon Chagnon, que quería validar su hipótesis biologista.
(Si no has asimilado la anterior frase, vuélvela a leer porque está absolutamente documentado, y piensa en los tiempos en los que el Señor Sting se fotografiaba con estos indígenas que supuestamente vivían en el paraíso. Sí, el maléfico Doctor Fauci estaba detrás de esta operación, aunque no se le nombra).
Durante unos escalofriantes 20 minutos, se nos narra cómo, milagrosamente, tan sólo unos días antes de que llegaran los científicos de los CDC a vacunar de sarampión a los indígenas, aparecía un brote de la misma enfermedad, jamás vista antes en aquel lugar, y cuando se iban, los indígenas sufrían una brutal mortalidad a consecuencia de los efectos secundarios de los pinchazos. No siendo esto suficiente, varios de los propios enfermeros que pinchaban a los yanomamis estaban enfermos y, posiblemente, contagiaron a los indígenas, generando una mortalidad tal que los indios, a partir de entonces, no quisieron ni oír hablar de los blancos.
Estoy resumiendo 20 minutos plagados de declaraciones tanto de indígenas como de etnógrafos a partir de las tesis que se escribieron sobre la expedición pues, el enfrentamiento entre antropólogos de derechas y de izquierdas que describe, de fondo, el documental, hace que esta auténtica conspiración esté plenamente documentada, aunque los antropólogos, claro está, no son conscientes de que hubo tal conspiración (simplemente piensan que son malas personas). Evidentemente, todos vosotros os daréis cuenta de que lo sucedido con el Covid en el año 2020 a nivel mundial se ensayó en los años 90 con los yanomamis (y seguidamente en África negra e India). La diferencia es que, hasta ahora, no he visto nada tan bien documentado como este documental ABSOLUTAMENTE IMPRESCINDIBLE.
Es tan brutal su contenido, que he pasado por alto la historia del ambicioso antropólogo norteamericano que se casa con una yanomami de 11 años (y tiene tres hijos con ella) para «estudiar su comportamiento desde dentro», y así ganar fama, obviamente.
De verdad, este vídeo es insuperable: absolutamente histórico.
*El hecho de que la financiación para las vacunas llegue de la Agencia de la Energía Atómica, que puede parecer increíble, no me sorprende en absoluto, pues este organismo es capital en la conspiración en Estados Unidos.