[La siguiente crónica de Real Raw News es muy cruda y puede herir la sensibilidad de algunos lectores].
Según el agente ruso Zacharov que supuestamente informa a Real Raw News, un equipo de francotiradores de las fuerzas especiales rusas habrían asesinado en Kiev a la ejecutiva de una firma de robótica, y asesora del Foro de Davos, Kiva Allgood, acusada de conspirar con Zelensky para desestabilizar la economía rusa, mientras se entrevistaba con el ministro de economía ucraniano. Supuestamente, el plan de Allgood consistía en inundar Rusia de rublos falsos para conseguir destruir su economía creando una gran inflación. Los servicios secretos rusos se habrían enterado de este plan en marzo, después de escuchar una conversación entre el ministro de economía ucraniano, Serguei Marchenko, y la citada miembro del Foro de Davos. (Obviamente, tienen hackeadas sus telecomunicaciones).
Siempre según esta crónica, la asesora del difunto Klaus Schawb recibió en el ojo izquierdo una bala disparada por un francotirador¡a más de un kilómetro de distancia! que le salió por la parte posterior del cráneo, muriendo instantáneamente. Tras comprobar que la citada globalista no se movía, los dos francotiradores abandonaron la azotea del edificio desde el cual dispararon.
Según el supuesto portavoz ruso Zacharov, el gobierno de Putin ha afirmado que matará a todo aquel miembro del Foro de Davos que se encuentre o visite tanto Ucrania como «países del este de Europa» por considerarlos una amenaza para su país.
La crónica termina con la supuesta respuesta de Putin cuando se le preguntó si estaba contento con la desaparición de Klaus Schawb:
«El Presidente Putin está muy contento de que el animal se haya ido, pero también está triste de que se lo hayan llevado sus amigos y no nosotros. Murió demasiado piadosamente. En nuestras manos conocería el verdadero significado del sufrimiento. Su muerte no pone fin al Foro de Davos. No es como tu ficción vampírica americana, en la que si al vampiro jefe se le clava una estaca, todas las personas a las que había mordido se curan mágicamente del vampirismo. Todavía queda mucho trabajo por delante».
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Comentario personal. Está claro que ahora ya tanto los Sombreros Blancos (con su «tapadera», los Sombreros Rojos) como las fuerzas especiales de Putin han pasado a otra fase en donde no tienen miramientos con el Derecho Internacional ni los Derechos Humanos: están decididos a acabar con los globalistas.
Tras la desaparición de Klaus Schawb, a mi cabeza llega la figura del verdadero «cerebro» de los globalistas, el historiador Yuval Harari.
