(Noticia de Real Raw News que puede tener varias interpretaciones).
El lunes, varios gobernadores afines a Joe Biden activaron un programa de emergencia mediante el cual enviaron 1000 trabajadores sanitarios pertenecientes a la Guardia Nacional a hospitales de seis estados, que supuestamente estaban sobrecargados por las consecuencias de la variante Ómicron.
Los médicos pertenecientes a la Fuerza Secausus de la Guardia Nacional de Nueva Jersey, asignados al Hospital Regional de Hudson, no encontraron ni un solo pacientes de Covid, según reportó el teniente Michael McKenzie, asistente médico.
Tanto el citado teniente como otros 13 compañeros de la Guardia Nacional (médicos, enfermeras y asistentes de cirujanos) recibieron la orden de sustituir a la plantilla oficial, que estaba desbordada por casos de Covid, para que se pudieran dedicar a las otras dolencias. «Nos quedamos de piedra», dijo el Teniente McKenzie. «Nos habían dicho que los casos de Ómicron habían inundado el hospital; la realidad es que sólo 4 de las 14 camas de Unidades Intensivas estaban ocupadas, y ninguna por casos de Covid. Dos tenían problemas cardíacos, uno por un disparo, y el cuarto, y otro por enfermedades que no tienen nada que ver con el Covid».
El Teniente estaba presente cuando su Coronel preguntó a los responsables del hospital por qué les habían llamado si allí no había casos de Covid, y ellos tenían por misión ayudar en esa cuestión. La respuesta de los gerentes del hospital fue que ellos no tenían nada que ver, que habían sido Joe Biden y el gobernador Phil Murphy quienes les habían llamado. «Personalmente, considero su presencia una intromisión y una inconveniencia», dijo uno de los responsables médicos.
La crónica de Real Raw News detalla que al hospital no sólo estaba corto de enfermos de Covid, sino que también de personal. En sus paseos por los pasillos, el Teniente McKenzie no se cruzó con un solo médico o enfermera que se encaminara a una habitación, razón por la cual, le preguntó a una enfermera y a un bedel. «Primero que contaron que había tantos médicos y enfermeras que habían dado positivo al Ómicron que se habían confinado en sus casas. Después, me contaron que, tras imponer la vacunación obligatoria, el hospital se habían quedado sin un tercio de sus trabajadores». Ahora elige tú a quién crees.
La crónica del juicio a Dick Cheney no aparecerá hasta mañana porque el juicio se movió al día de hoy.
*Creo que ahora todos entendemos por qué el Tribunal Supremo USA no ha revocado la orden de vacunación obligatoria para el personal médico, tal y como ha hecho con el resto de trabajadores. Los patriotas quieren obligarlos a que digan la verdad.